martes, 2 de septiembre de 2025

EL DICTÁFONO

 EL DICTÁFONO

Desde hace un tiempo solemos escuchar o leer de vez en cuando noticias sobre la preocupación acerca de las faltas de ortografía en el alumnado de nuestros centros. En muchas ocasiones la justificación es el uso excesivo de las tecnologías o la reducción de la lectura por parte de niños y adolescentes. 

Desde las aulas se siguen trabajando las reglas ortográficas, el alumnado las memoriza y luego hacen los cuatro o cinco ejercicios que el libro propone para afianzar pero ¿es efectivo? Pues parece que no. 

Si buscamos qué dice la neurociencia después de estudios hechos sobre el aprendizaje de la ortografía vemos que en él intervienen varios factores clave:

  • Memoria a corto plazo. Permite retener y recuperar información mientras se escribe. 
  • Memoria a largo plazo. Donde se almacenan las representaciones ortográficas de las palabras. Esto significa que cuanto más se expone una persona a una palabra bien escrita, más probable es que la recuerde bien. 
  • Lectura frecuente. Este factor está relacionado con el anterior. 
  • Escritura a mano. Implica un procesamiento más profundo y multisensorial (visual, motriz, kinestésico) que teclear. Writing by hand helps children learn letters better than typing (Journal of Experimental Child Psychology), The VWFA Is the Home of Orthographic Learning When Houses Are Used as Letters (https://www.researchgate.net/publication/331037603_The_VWFA_Is_the_Home_of_Orthographic_Learning_When_Houses_Are_Used_as_Letters)
  • La motivación debido a que está altamente relacionada con la atención y la consolidación de información. 
  • Corrección activa de errores. 
Teniendo presente estos factores, ¿qué actividad podríamos llevar a cabo en nuestras aulas para conseguir que nuestro alumnado mejore o aprenda correctamente la ortografía?

EL DICTÁFONO

Material
  • “Teléfono”
  • Cinta subrayadora. 
  • Hojas del enlace
Procedimiento
  • Iniciamos la actividad haciendo un dictado. Debe ser motivador y divertido como por ejemplo dictados incompletos, de movimiento, de letras de canciones, de chistes… (hay algunas propuestas en el documento del enlace). 
  • Terminado el dictado corregimos la ortografía y a continuación repartimos a cada niña y niño las dos primeras hojas del documento para que escriban en el rectángulo correspondiente las palabras incorrectas. 
  • Repartiremos cinta subrayadora para que pongan sobre cada palabra siguiendo el color del rectángulo. 
  • Durante tres días (consecutivos o intercalados) el alumnado sacará las hojas del dictáfono y leerá durante 30’’ las palabras que apuntaron. Terminado el tiempo intercambiarán hojas y cogerán el dictáfono (teléfono de hilo) para “llamarse” y decirse mutuamente las palabras. Primero dicta el niño que llama y el otro escribe en su libreta y luego a la inversa. Una vez terminan es el momento de devolverse las hojas para corregir los propios errores y hacer dos cosas más: quitar la cinta subrayadora de las palabras bien escritas y apuntar en la tercera hoja del documento del enlace las palabras, los aciertos y los fallos. 
  • El siguiente día repetiremos el mismo procedimiento pero durante los 30’’ deberán focalizar su atención en las palabras que siguen estando subrayadas (esta dinámica se hará durante dos días). 
  • El cuarto día es el momento de la llamada final. La dinámica será la misma pero en esta ocasión los 30’’ servirán para leer todas las palabras (estén o no subrayadas). 
  • Tras la llamada final haremos un nuevo dictado motivador añadiendo en las hojas del dictáfono las palabras escritas incorrectamente. 
  • Durante cuatro días haremos las tres llamadas y la llamada final siguiendo las mismas dinámicas explicadas anteriormente. 

¿Funciona?

Después de un curso poniendo en práctica el dictáfono la valoración de la actividad ha sido muy positiva. Por una parte, y como punto principal, ha resultado muy motivadora para el alumnado. Por otra, hemos observado una mejoría generalizada en la correcta escritura de las palabras trabajadas. Eso sí, es necesario señalar que la actividad ha sido complementada con actividades que realizábamos quincenalmente (y de forma progresiva más espaciadas en el tiempo) en las que partíamos de las palabras trabajadas para reforzar su repaso. Algunas de estas han sido:  un bingo de palabras, la corrección por parte del alumnado de textos breves con errores, dictados de las palabras trabajadas en pizarras vileda a modo de concurso ¿La finalidad de esto? Favorecer el aumento de la visualización y la escritura correcta que fortalezcan las redes neuronales de la memoria a largo plazo. Y con todo esto, ¿te animas?






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